Las funciones vitales son las funciones que realizan los seres vivos para mantenerse con vida.
Las funciones vitales son tres nutrición, la relación y la reproducción.
La nutrición comprende todos los procesos para conseguir los materiales de construcción y la energía que necesitamos para vivir.
La relación nos permite conocer los cambios que se producen en el medio y en nuestro cuerpo y reaccionar ante ellos.
La reproducción consiste en tener descendientes.
La función de nutrición consiste en conseguir los materiales y la energía que necesitamos para vivir.
La energía la necesitamos para realizar nuestras actividades diarias: correr, estudiar…
Los materiales son necesarios para crecer y reponer los que se van gastando o estropeando.
La energía y los materiales se obtienen de los nutrientes que contienen los alimentos.
La nutrición se realiza por medio de cuatro procesos: la digestión, la respiración, la circulación y la excreción.
La digestión consiste en obtener los nutrientes de los alimentos.
La respiración consiste en introducir el oxígeno del aire en el cuerpo.
La circulación consiste en repartir por todo el cuerpo el oxígeno y los nutrientes y en recoger las sustancias de desecho.
La excreción consiste en expulsar las sustancias de desecho de nuestro cuerpo.
Los cuatro procesos de la nutrición tienen lugar en diferentes aparatos de nuestro cuerpo: el aparato digestivo, el aparato respiratorio, el aparato circulatorio y el aparato excretor.
- El aparato digestivo. Se encarga de la digestión.
- El aparato respiratorio. Se encarga de la respiración.
- El aparato circulatorio. Se encarga de la circulación.
- El aparato excretor. Se encarga de la excreción.